Cómo lo hacemos
Nos consideramos, por la labor que venimos realizando, un grupo de investigación-acción cooperativa/formativa. Este enfoque conlleva la transformación de la realidad y no sólo el conocimiento e interpretación de la misma.
Por un lado, en nuestro grupo de profesorado se reflexiona y se trabaja desde una metodología de investigación y un estilo de intervención didáctica/social, ya que propone el análisis de la realidad como una forma de conocimiento y sensibilización de la propia población o colectivos determinados, que pasan a ser, a través de este proceso, sujetos activos y protagonistas de un proyecto de desarrollo y transformación de su entorno y realidad más inmediata. En nuestro caso concreto la comunidad educativa (familias, profesorado, alumnado y personal de servicio)
Por otro lado, las familias, con la finalidad de apoyar el trabajo de investigación, analizan los propios contextos e intentan dar respuesta a las preguntas de investigación, a modo de investigación particular que cada grupo realiza, desde la práctica de sus proyectos concretos. El objetivo común es el desarrollo de las cuatro dimensiones del ser humano, o sea: los procesos cognitivos, el lenguaje, la afectividad y la autonomía, en todos los miembros de la casa. Cada familia provoca el aprendizaje elaborando sus proyectos de investigación dependiendo de sus necesidades, deseos o motivaciones.
Los profesionales que desarrollamos el Proyecto Roma procuramos ser coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos, entre nuestro pensamiento y nuestras acciones. Precisamente la herencia que FREIRE deja al Proyecto Roma se podría resumir, sin ánimo de simplificar en: la necesidad del compromiso ético de reinventar la escuela y la sociedad, la necesidad de la relación dialéctica entre reflexión y acción y la necesidad de la problematización de la educación para el desarrollo del hombre y la mujer libre, a través del diálogo y la reflexión compartida como acto permanente de descubrimiento de la realidad y la construcción del conocimiento. Por tanto, lo esencial del procedimiento de trabajo del Proyecto Roma, es el esfuerzo común por aprender unos de otros.
El Proyecto Roma es una propuesta de compromiso personal fundamentalmente ético, un proyecto moral desde el convencimiento de que un mundo mejor es posible y que, para conseguirlo, no basta con cambiarlo, sino que es necesaria la transformación de la sociedad. Esta idea lo sitúa en planteamientos claramente críticos e histórico-culturales.